Ordenados para servir, congregar, transformar y enviar
En virtud de nuestro Bautismo, todos los cristianos forman parte de un sacerdocio común de los creyentes. Todos estamos llamados a participar en la misión de Cristo. Mediante el sacramento del Orden, obispos y sacerdotes reciben un papel especial en la realización de esta misión. Ejercen un sacerdocio ministerial. Los diáconos también reciben una gracia especial a través de la ordenación y son llamados a ayudar al ministerio de obispos y sacerdotes (Catecismo de la Iglesia Católica [CIC], nos. 1547, 1554).
El papa Benedicto XVI escribe: “Antes que nada, el sacerdote es servidor” (Sacramentum Caritatis
[Sacramento de la caridad], no. 23). Al congregar a la comunidad, plasmar el amor de Cristo por los
pobres, presidir la Eucaristía y evangelizar las realidades sociales, los ministros ordenados ayudan a los cristianos a imitar la misión de Cristo de amor y justicia.
Mediante la ordenación, los sacerdotes se convierten en representantes de Cristo en la Iglesia, como testigos de la santidad y el amor, predicadores del Evangelio, pastores de los fieles, convocantes del culto divino y edificadores de la Iglesia. Mediante su ministerio, los sacerdotes son llamados, en imitación de Cristo, a “anunciar a los pobres la Buena Nueva. . . a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor” (Lc 4:18) (Juan Pablo II, Pastores Dabo Vobis [Os daré pastores], no. 11). Los diáconos,
también, están ordenados a imitar Cristo en su ministro de servicio y caridad a los pobres y necesitados en la comunidad.
Como compañeros de trabajo con sus obispos en la enseñanza y realización de la misión de Cristo, los sacerdotes y los diáconos proclaman la Palabra de Dios a su pueblo. Esto incluye la educación sobre la doctrina social de la Iglesia, que se basa en las Escrituras y en la Tradición, y ayudar a los miembros de la comunidad a tomar “conciencia del derecho y el deber de ser sujetos activos de esta doctrina” (Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia [Compendio], no. 539).
San Lucas 10:16
"Quien a ustedes los escucha, a mi me escucha; y quien a ustedes los rechaza, a mi me rechaza; y quien me rechaza a mi, rechaza al que me ha enviado."
2 Cronicas 19:11
"Amarias, sumo sacerdote, sera su jefe en todos los asuntos de Yahve; y Zebadias, hijo de Ismael, jefe de la case de Juda, en todos los asuntos del rey. Los levitas les serviran de escribas. !Esfuercense, y manos a la obra! Y este Yahve con quien sea bueno."
San Mateo 19:12
"Porque hay eunucos que nacieron asi del seno materno, y hay eunucos que fueron hechos tales por los hombres, y hay eunucos que se hicieron tales a si mismo por el Reino de los Cielos. Quien pueda entender, que entienda.""
1 Corintios 4:14-16
"No les escribo esto para avergonzarlos, sino mas bien para amonestarlos como a hijos mios queridos. Pues, aunque hayan tenido diez mil pedagogos en Cristo, no tienen muchos padres. He sido yo quien, por el Evangelio, los engendre en Cristo Jesus. Les ruego, pues, que sean mis imitadores."
1 Corintios 7:7-8
"Mi deseo seria que todos fueran como yo; mas cada cual tiene de Dios su gracia particular: unos de una manera, otros de otra. No obstante, digo a los solteros y a las viudas: Bien les esta quedarse como yo."